segunda-feira, 11 de janeiro de 2010

Amor posible

"Aunque no puedas entrar, no te alejes de mí, tiéndeme siempre tu mano aunque no puedas verme; si no lo haces, olvidaré la vida o ella me olvidará a mí", Jesús a María de Magdala, en El Evangelio según Jesucristo, José Saramago, 1991.